jueves, 28 de marzo de 2013

Al habla... Mamá Duende



Mmmmm..... Estooooo..... Errrrr......

Nop. Definitivamente, este tipo de entradas donde una ha de hablar un poco sobre sí misma y presentarse no son lo mío. Sí, sé que ha sido idea mía, que podría no hacerlo (total, el blog es mío), pero me han enseñado que, cuando una llega a un lugar nuevo, saluda y se presenta. Con elegancia. Con estilo... Uf.

Allá vamos *tomando aire*.

Soy una mujer de treintaytantos, licenciada en Biología y en Ciencia y Tecnología de los Alimentos, que vive en un pueblecito del Levante español. Pareja de Papá Duende desde hace —madrededios— doce años y casada con él desde hace siete; mamá de un Bebé Estrella, de una Duendecilla de dos años y embarazada de otro Pequeño Duende.

Me gusta leer, escribir, la Naturaleza —los paseos por la montaña y por la playa, hum—, el cine y la música (joer, qué típica). Además, soy adicta a blogs y a foros, aunque desde que soy mamá dedico muy poco tiempo a todo esto. ¿Me entendéis? Bien, seguid conmigo.

De siempre me han gustado mucho los bebés (de cero a unos seis meses) y menos los bebés más mayores o los niños. Sin embargo, desde que la Duendecilla corretea por casa, y por donde sea, he aprendido que los bebés "mayores" también tienen su aquel —sobretodo si no están en plan rebelde o en modo bestia parda. He descubierto los placeres de hablar idiomas raros, volver a jugar a Lego y a los trenes, de ver de nuevo las pelis Disney de mi infancia (sí, ella todavía no sabe que son las "viejas", aún la engaño) y de hacer como que veo Dora la Exploradora mientras la destripo despacio y con alevosía en mi mente. Enseñarle el mundo a la enana es un placer en sí mismo. Y cuando te busca porque sólo tú puedes solucionarle lo que le pasa, te sientes Superman (nunca me gustó Superwoman).

Ser mamá es una aventura, copa tu vida al 200% y tú, a veces, peleas por encontrar a esa "yo" que eras antes. Buscas espacios, tiempos... pero, ah, esa "yo" ya no existe. Ahora, incluso cuando estás en modo madre off, sigues sintiendo y pensando como madre.

Lo soy.

Lo seré ya toda la vida.

Esta es Mamá Duende.

miércoles, 27 de marzo de 2013

Estrenando blog...

Sí, otro más. Un nuevo reto, otro hijo hecho de palabras que mantener. Quienes me conocéis lo sabéis: me gusta escribir, me gusta expresarme y comunicarme con las letras. Tengo tres blogs como autora y otros tres —contando con este— personales. No penséis que soy como Shiva y cuento con más de dos brazos —necesitaría también más de un cerebro—; soy una persona normal, trabajadora (dentro y fuera de casa), esposa, madre, hija, amiga y mujer. 

Inquieta, eso sí. 

Me sería imposible mantener seis blogs a la vez, y, de hecho, alguno pertenece a una época muy concreta de mi vida: me sirvió en su día y en la actualidad está completamente parado. Otros están en stand by, tienen sus momentos y se los dedico cuando me llama hacerlo. 

Y luego está este. 

Una vez, en un momento delicado de mi vida, alguien sabio me dijo que yo era una mamá con duende. Ahora soy mamá de una preciosa Duendecilla que nos hace felices desde hace dos años y estoy en proceso de fabricación de un nuevo Duende, que nacerá, si todo va como debe, a finales de octubre. El blog del embarazo de la Duendecilla es privado, así lo ideé y así se quedó. Este nuevo blog surge de la inquietud de contar y compartir las visicitudes de una mamá cualquiera en mi situación; cosillas cotidianas, dentro y fuera de rutina, que no tienen nada de especial, salvo para quien las vive. Como este blog, hay mil en la blogosfera (y me quedo corta, fijo). Este es el nuestro.


Bienvenid@s. Estáis en vuestra casa.